Cómo desarrollar una buena contabilidad doméstica


¿Qué es la contabilidad doméstica?

En primer lugar, podemos definir como contabilidad doméstica a aquella que se hace en el ámbito del hogar o de la vida cotidiana de cada persona.

Al igual que las empresas, las personas tienen una gran cantidad de gastos e ingresos.

Esto nos lleva a la necesidad de desarrollar una contabilidad parecida a la empresarial pero esta vez en el ámbito personal.

La contabilidad doméstica es una parte fundamental de la vida de las personas ya que ayuda a mantener un equilibrio o superávit económico que desemboca en una vida más acomodada y placentera.

Aunque parece algo sencillo, no todas las familias tienen la capacidad de poder llevar a cabo una buena contabilidad doméstica, por lo tanto, aquí procederemos a explicar brevemente cómo se desarrolla.

Elementos básicos de la contabilidad doméstica

  • Gastos: Se trata de todas las salidas de dinero de las que tiene que hacerse cargo una persona. Entre los gastos que soporta una persona en su día a día podemos encontrar la cuota hipotecaria o el alquiler, la alimentación, suministros domésticos y todos los gastos accesorios de ocio. Estos últimos son los más difíciles de calcular, por ello se intentará realizar una estimación mediante un promedio.
  • Ingresos: La gran parte de los ingresos de una persona suele venir de las retribuciones laborales o de la pensión. Las personas tienen dinero invertido tienen, además, ingresos financieros derivados de intereses o rentas inmobiliarias.
  • Presupuesto: Una vez conocido los gastos y los ingresos se han de elaborar ajustes de los mismos para adaptarlos a las necesidades de cada persona.

Método Kakebo

Una forma que se está haciendo muy popular a la hora de llevar a cabo la contabilidad doméstica es el método Kakebo.

Este método consiste en ir apuntando en una libreta todos los gastos que se realizan a lo largo del mes.

Para desarrollar este método lo primero que se ha apuntar son los ingresos y gastos fijos que se tienen a lo largo del mes. Además. se añade el dinero que se quiere destinar a extras y a ahorro.

Este método divide los gastos del siguiente forma:

  • Gastos supervivencia: Se trata de los gastos fijos que se tienen todos los meses.
  • Ocio: Gastos destinados a diversión y sociales.
  • Cultura: Gastos en el desarrollo intelectual y cultural de una persona, como puede ser ir al cine, al teatro, libros…
  • Extra: Todos los gastos imprevisto que surjan a lo largo del mes.

No hay que despreciar ningún gasto, aunque sea muy superfluo, ya que la suma de todos estos gastos suele dar una gran cantidad de dinero que no hay que despreciar.

Con este método se busca que las personas se den cuenta en que gastan su dinero para ver cuales son los gastos innecesarios en los que puede recortar.

La importancia del ahorro

Uno de los objetivos principales del desarrollo de la economía doméstica es la generación de un superávit en nuestra economía que nos lleve a generar ahorro.

Independiente del nivel de ingresos, siempre es conveniente intentar ahorrar para tener un fondo de emergencia que utilizar en momentos que surjan gastos imprevistos.

Además, gracias al ahorro podemos acumular una gran cantidad de capital que nos lleve a invertir para generar ingresos extra para tener un futuro con una mayor calidad de vida y que se pueda ajustar a nuestros deseos.


Sergio Sanchez

Asesor fiscal y laboral desde 2004, docente y apasionado del marketing digital. Murciano de nacimiento y en mis ratos libres hago deporte, veo cine y publico en este blog. :-).

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